Creo que lo peor que le pudo pasar a esta película fue su promoción, la publicidad negativa generada por las escenas de sexo y algún que otro desnudo frontal por parte de Fassbender. Esta campaña provocó las ganas de verla por la polémica, mucha gente no sabía ni siquiera de qué se trataba a la hora de ir al cine y para aquellos que sabían de qué iba, este tipo de información nos predispone a algunos para bien y a otras para mal. Ambas situaciones no son buenas a la hora de la valoración de la obra.
Steve McQueen, director Ingles que salió a la luz allá por el 2008 cuando ganó la Golden Camera en Cannes y seguidito un BAFTA por Most Promising Newcomer, con su opera prima Hunger (2008), que retrata la vida carcelaria. En esa ocasión Steve también hizo el guión y lo tuvo de protagonista a Fassbender con el cual parece que quedaron en buenas migas, ya que lo volvió a llamar para su segunda película Shame (2011).
La música… ¡qué importante!, más en una película como esta, donde el protagonista tiene poco para interactuar debido a su estilo de vida y ésta acompaña en muchas escenas que ayudan al espectador a interpretar. Un gran acierto en la parte de la música clásica al elegir versiones de Glenn Gould y en los demás temas, Blondie, John Coltrane; la verdad que un lujo. A pesar de que no es un musical, uno de los momentos más importantes es totalmente cantado por la gran Carey Mulligan, que es una versión de ensueño de "New York, New York", que no te deja respirar.
En Shame vamos a ver a Brandon (Michael Fassbender) interpretando a un treintañero neoyorquino con serios problemas para controlar y disfrutar de su vida sexual, a esto se le agregará la visita de su hermana menor Sissy (Carey Mulligan), que le romperá la estructura, ya sea para bien o para mal. Uno de los aciertos de la película, a mi parecer, fue la relación de los hermanos, encima está tan bien hecha que con lo poco que contaron pudimos armar sus historias, solamente quedando en el tintero una frase que dice Sissy sobre lo mal que la pasaron de chicos.
Esta película es sobre dos personas que sufren, con sus miedos e inseguridades, es sobre la vida en la gran manzana y el retrato de una sociedad moderna que nos guste o no, es así, no es sobre la adicción al sexo que tiene Brandon, eso es solo un árbol del gran bosque que es esta obra.
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Elizabeth